BALI (III). ENTRANDO EN MATERIA.

Pues puestas asi las cosas, efectivamente cogi un coche alquilado. Tuve discusion con el tipo porque me daba uno mas viejo que el contratado, aunque parecia mejor coche. Total, que al final me la envaino y lo cojo, porque si no me hacia esperar demasiado tiempo. Por equivocacion, en medio de un trafico infernal, salgo hacia Nusa Dua, una pequenha ciudad al sur del aeropuerto, donde se concentran casi todos los hoteles de lujo. Pude descubrir como es la idea de urbanismo que los ricos tienen en su mente. Es bien sencilla:
Primero se construye una autopista que llegue hasta alli desde el aeropuerto. Puede que luego sirva para pasar por otros sitios, pero lo importante es que llegue hasta alli. Despues se coge una playa de arenas blancas y aguas azul turquesa, se trocea y cada porcion se le entrega a una cadena hotelera, que la convierte en privada y construye un "magnifico" hotel-resort en el que hay de todo y al que solo se puede acceder siendo cliente. Por fuera de los resorts unas avenidas que distribuyen el trafico magnificamente ajardinadas y en las que no hay absolutamente nada. Nada de nada. Ni una tienda, ni un kiosco..., nada. Y a la entrada del pueblo, un control de policia que no deja pasar a ciudadanos balineses si no es con justificacion. Si eres turista no te dicen nada.
Solo queda un tramo de playa por urbanizar y es que resutla que en ella hay un santuario hinduista. En fin, al menos ahi se paran.
Bueno, para no hundirme en la depresion huyo hacia el norte por la costa Este y poco a poco me voy recuperando. Llego a Sanur y descubro playas estupendas en las que hay gente mas o menos normal y a las que se puede acceder con tranquilidad. Sigo hacia el norte y la cosa va cambiando a mejor segun se aleja uno de las zonas mas congestionadas. Llego tarde y cansado a un bonito lugar llamado Candi Dasa. Me alojo en casa de un australiano parlanchin, ex trabajador del aeropuerto de Sydney, casado con una indonesa y residente aqui desde hace cuatro años , que reune en su alojamiento a un variado grupo de glorias internacionales a los que le gusta darles palique. Yo creo que es eso lo que verdaderamente le gusta a este tipo. Cotillear. No dejar de hablar. Se ha montando el negocio ideal. Entre ellos, entre la parroquia, hay una alemana que es anotropologa - musicologa y esta especializa en Indonesia, asi que habla el idioma local. Total, muy curioso lo que se mueve por el mundo. La conversacion es muy animada y se rien mucho. Yo me pierdo como un 40 - 50%, asi que me rio menos, no vaya a ser que en el otro 50% se esten riendo de mi y hagamos el gil al 100%. En fin. Lo del ingles parece la permanente asignatura pendiente de los espanholes y yo creo que el problema, en el fondo es que no lo practicamos, por mucho que nos matriculemos voluntariosamente en academias cada Septiembre.
Al dia siguiente el tipo nos invita a acompanharle con su familia a un ritual fuenerario de los que se suelen celebrar en muchos lugares de Bali, segun he leido. Como aqui, en la isla son hinduistas, a diferencia del resto de Indonesia, donde son musulmanes, la cosa tiene caracter de celebracion y de reencarnacion, asi que, nada: Ambiente festivo y todos bienvenidos. Veo una casa balinesa por dentro y me dedico a hacer fotos. El personal encantado. Descubro que les encanta que les fotografien. Te dan las gracias. Chollo para mi. Preguntando aqui y alla, con el ingles y con la alemana que hace sus practicas, me entero de que el asunto es que, cuando uno se muere, lo incineran. Pero si las familias son modestas, no pueden pagar el ritual correspondiente y entonces, se espera a una fecha mas adecuada segun el calendario balines y se celebran estas ceremonias entre varias familias que comparten gastos. La cosa dura dos dias, asi que me voy a perder la parte buena que es al dia siguiente, con la cremacion de huesos o algo que represente a los difuntos. Lo de este dia es como el funeral previo. Pero todo el mundo esta muy sonriente y feliz y nos da las gracias por haber venido e insiste en animarnos a que comamos. El unico problema es que la comida pica como si le hubieramos hecho algo y son las diez y media de la manhana. En fin, se torea el tema como se puede y sigo camino. Tengo la sensacion de haber empezado ya a meterme en el Bali de verdad. Algo diferente. Comienza el viaje que a mi me gusta.
Me adentro en una zona de costa y montanha y el coche me empieza a dar algun problema. Parece que con el aire acondicionado se descarga la bateria. Si paro, que voy haciendolo cuando quiero hacer fotos, después no arranca. Estoy en una zona en que lo unico a mi favor es el desnivel del terreno. Se me queda tirado una vez y lo arranco marcha atras, dejandolo caer. Menos mal, porque por alli no tenia pinta de pasar nadie en un buen rato. Sigo. Cuando estoy en altura me puedo permitir quitar el aire acondicionado porque hace fresco, pero cuando bajo a la costa, el calor humedo resulta insportable. Paro para comer y el coche me da un respiro, porque vuelve a arrancar sin problema, asi que continuo. Llego a una de las zonas que me planteo como posibilidad para quedarme a dormir: Amed. Costa Este y buena zona para bucear. La carretera se va plagando de alojamientos, cabañas, bungalows..., asi que me planteo parar par pedir precio en alguna. En el primer lugar que paro, me dan buen precio y ademas el coche no vuelve a arrancar. Miel sobre hojuelas. No pierdo ni un minuto mas. Decido quedarme alli mismo, disfrutar del lugar y su piscina con el borde enrasado con el horizonte marino y sus pagodas-apartamento a precio irrisorio. Despues llamo al del coche y le canto la gallina. Comienza diciendome que empuje el coche para arrancarlo. Casi me da un pasmo. Y a el otro, porque como son hinduistas todo tiene que ser buen rollito..., En fin, que la tenemos. Le amenazo con denunciarle y le digo que voy a llamar a VISA en Espanha para bloquear el pago y que quiero un coche en perfecto estado esa misma noche. Asumiendo que no me va a hacer ni puñetero caso, me relajo, descanso, y cuando voy a salir a cenar aparecen dos chavales con un Suzuki en perfecto estado, dispuestos a dejarmelo y llevarse el otro. No me lo puedo creer. Se han comido tres horas o mas de carretera desde Kuta.
Bueno pues a partir de ahi comienza la relajacion de verdad. Tres dias en Amed, buceando, haciendo snorkel y recuperando las fuerzas y las ganas. Tratamiento anti estres que termina con un buen masaje junto a la piscina. Maravilloso.
Antes de cerrar me encuentro con tres madrilenhas, dos de ellas espanholas y una italiana a las que espero ver proximamente. Agata (la mas guapa) Arantxa y Chiara (que no desmerecen, en absoluto) deambulan por Bali en companhia de un argentino de aspecto italiano, Adrian, que vive en Sydney. Un tio simpatico y con bastante paciencia, aunque cabe decir que todo tiene un limite. Quedamos para futuros encuentros. Sin darme cuenta, estoy inmerso ya en el Bali que yo buscaba. Solo queda ir mejorando.